To the rescue

Pues sí, como dije el otro día, siempre hay un alma caritativa q viene en tu auxilio cuando te hundes. En este caso más d una. Soy muy afortunada, lo se, hay gente q no tiene a nadie a quien agarrarse, pero yo tengo un montón d posibilidades!!! Ayer vino mi hermanín, q hoy cogía un avión (bueno, no lo habrá cogido aún, supongo) pa irse a Italia, al premio d Fórmula 1 en Milán o x ahí, q le tocó el viaje en el Parque d Atracciones, aquí en Madrid, y se iba con un amigo suyo (Rodri, d toda la vida). Pues fuimos x ahí a cenar con Tamara y con Ricardo, y luego nos fuimos d juergota!!! Vaya risas. Acabamos en mi salón diciendo tonterías, genial. Eso sí, cuando me metí a la cama se me olvidó tirar el chicle, y como no lo almacené en el sitio d guardar el chicle (aupado entre la encía y la cara interna dl labio, sobre el nacimiento d las muelas) se me debe haber caído durante las escasas 3h d sueño, y se ha pegado a la sábana y a mi pelo!!! Menos mal q en mi melena leonina no se nota un buen trasquilón, xq he tenido q cortar, jajajaja, soy lo peor o qué!!! Pero bueno, acabo d leer en una página q he encontrado en el Google q lo q hay q hacer para quitar el chicle d la ropa es frotarlo 3min con un hielo, se endurece y lo arrancas sin más. Para el pelo ponía q lo metieras en leche caliente y luego lo plancharas!!! En fin, benditas tijeras.

Y ayer, durante la noche, en un garito desconocido hasta ahora, vino la tormenta eléctrica. Espalda sudada (sudor propio y ajeno, es lo q tienen los bares), d repente unos dedos se deslizan hacia abajo, apenas 5cm en la base dl cuello, pero vaya descarga de dopamina. Tenía q ser obligatorio sentir eso x lo menos una vez a la semana. Qué digo a la semana, al día!!! Músculos horripiladores en acción, pelos d punta, piel d gallina, escalofrío. PLACER.